Las aplicaciones en Slack optimizan tu trabajo, ya que aportan la información y los flujos de trabajo de distintas herramientas y lo concentran todo en un único lugar. Gracias a los accesos directos, es muy fácil interactuar rápidamente con las aplicaciones y terminar el trabajo sin necesidad de salir de Slack. Si dedicas menos tiempo a ir de pestaña en pestaña, podrás enfocarte en sacar el trabajo adelante.
La colaboración se materializa en Slack, donde es muy práctico organizar reuniones para resolver los asuntos cara a cara. Si las conversaciones se alargan, puedes crear una nueva reunión directamente desde Slack para que el equipo pueda verse y ponerse de acuerdo.
Puedes crear una encuesta en un canal de Slack para que las personas adecuadas puedan compartir sus opiniones libremente. Es muy fácil crear una encuesta en Slack, y responderla aún más. De esta forma, podrás tomar decisiones mucho más rápido y en colaboración con otros miembros.
Las conversaciones en Slack podrían generar la próxima gran idea de tu equipo. Da un impulso a tu proyecto creando un nuevo archivo directamente desde Slack para que tu equipo colabore fácilmente en tu último documento, hoja de cálculo o presentación.
La toma de decisiones es mucho más rápida en Slack, ya que los miembros del equipo pueden ir siguiendo las conversaciones y aportar sus ideas. Cualquier mensaje de Slack puede convertirse en un próximo paso a seguir o en un tema sobre el que hacer un seguimiento para que nada se pierda por el camino.
Las conversaciones de Slack incluyen un importante contexto que contribuye a que los miembros del equipo puedan acelerar la gestión de una situación concreta. Agrega mensajes de Slack a los tickets, tareas y registros para que sea más fácil recuperar el contexto al cambiar de herramienta.
Los atajos permiten que cualquier persona inicie flujos de trabajo con tu aplicación, ya sea que esté trabajando para tu equipo o para millones de usuarios de Slack.
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