En el entorno empresarial moderno, los vídeos corporativos se han convertido en una herramienta esencial para la comunicación interna y externa. Ya sea para promover productos, fortalecer la marca, capacitar empleados o informar a los clientes, los vídeos son una forma efectiva de transmitir mensajes. Sin embargo, muchas empresas perciben la creación y distribución de vídeos como una tarea desalentadora y complicada. Afortunadamente, con los avances tecnológicos y una buena planificación, es posible crear y compartir vídeos corporativos de manera eficiente y sin esfuerzo.
¿Qué son y para qué sirven los vídeos corporativos?
Los vídeos corporativos son producciones audiovisuales realizadas por una empresa u organización con el objetivo de comunicar y promocionar diversos aspectos de su actividad. Estos vídeos pueden tener múltiples propósitos y formas, adaptándose a diferentes necesidades y audiencias. Su contenido varía en función del objetivo que se quiera alcanzar.
Tipos de vídeos corporativos
- Institucionales: Presentan la misión, visión y valores de la empresa, así como su historia y logros.
- Promocionales: Destinados a promocionar productos o servicios específicos.
- Formativos: Usados para formación interna de empleados o para instruir a clientes sobre el uso de productos.
- Eventos: Documentan eventos corporativos como conferencias, lanzamientos de productos o reuniones anuales.
- Testimoniales: Incluyen testimonios de clientes, empleados o socios estratégicos.
- Responsabilidad Social Corporativa (RSC): Muestran las iniciativas y proyectos de la empresa en el ámbito de la RSC.
Funciones de los vídeos corporativos
Como hemos comentado, el hecho de compartir vídeos corporativos puede servir múltiples funciones según su enfoque y contenido. A continuación resumimos algunos de los usos más destacados de este tipo de contenidos:
- Comunicación Interna:
- Motivación y cohesión: Fomentan la unidad y el sentido de pertenencia entre los empleados.
- Formación y capacitación: Facilitan la formación de empleados de manera eficiente y uniforme.
- Informativos: Mantienen a los empleados informados sobre noticias, cambios o logros de la empresa.
- Comunicación externa:
- Marketing y promoción: Atraen y retienen clientes potenciales mostrando los beneficios y características de productos o servicios.
- Construcción de marca: Refuerzan la imagen y reputación de la empresa en el mercado.
- Relaciones públicas: Ayudan a gestionar la percepción pública de la empresa y a mantener una buena relación con los medios y el público en general.
- Ventas y negocios:
- Herramienta de ventas: Soportan el proceso de ventas proporcionando información clara y persuasiva.
- Presentaciones comerciales: Mejoran las presentaciones a clientes o inversionistas, haciendo más atractiva la propuesta de valor.
- Atracción de talento: Muestran la cultura de la empresa y sus beneficios, atrayendo a posibles candidatos.
- Responsabilidad Social Corporativa: Muestran los esfuerzos de la empresa en áreas como sostenibilidad y ética, mejorando su imagen pública y compromiso social.
Consejos para crear videos corporativos efectivos
Crear vídeos corporativos efectivos requiere planificación, creatividad y atención a los detalles. Aquí tienes algunos consejos para lograrlo:
- Definir objetivos claros
- Identificar el propósito: Establece claramente qué quieres lograr con el vídeo (informar, motivar, promocionar, etc.).
- Conocer la audiencia: Entiende a quién va dirigido el vídeo y ajusta el mensaje y tono en consecuencia.
- Planificación y guion
- Desarrollar un guion sólido: Un buen guion es la base de un vídeo efectivo. Debe ser claro, conciso y alineado con los objetivos.
- Storyboard: Visualiza cada escena antes de grabar para asegurarte de que todas las tomas necesarias están planeadas.
- Duración y ritmo
- Ser breve y al grano: Mantén el vídeo corto y directo. Los vídeos corporativos efectivos suelen durar entre 1 y 3 minutos.
- Ritmo adecuado: Mantén un ritmo que mantenga el interés del espectador sin ser demasiado apresurado.
- Contenido visual atractivo
- Imágenes y gráficos: Usa imágenes de alta calidad, gráficos y animaciones para hacer el vídeo más atractivo.
- Testimonios y entrevistas: Incluye testimonios reales de empleados, clientes o socios para añadir credibilidad y autenticidad.
- Mensaje claro y consistente
- Mensaje central: Asegúrate de que el mensaje principal sea claro y se repita de manera sutil a lo largo del vídeo.
- Consistencia de marca: Mantén la coherencia con la identidad visual y el tono de la marca.
- Llamada a la Acción (CTA)
- Incluir un CTA claro: Al final del vídeo, indica claramente lo que quieres que haga la audiencia (visitar una página web, contactarte, etc.).
- Música y efectos de sonido
- Selección de música adecuada: Elige música que complemente el tono del vídeo sin distraer.
- Efectos de sonido: Usa efectos de sonido para realzar puntos clave, pero sin exagerar.
- Edición profesional
- Corte preciso: Edita el vídeo para eliminar cualquier material innecesario y asegurarte de que fluya bien.
- Transiciones suaves: Usa transiciones limpias y profesionales para mantener la atención del espectador.
- Promoción y distribución
- Optimización para diferentes plataformas: Asegúrate de que el vídeo esté optimizado para la plataforma donde se va a publicar (YouTube, redes sociales, sitio web corporativo, etc.).
- SEO: Incluye palabras clave relevantes en el título, descripción y etiquetas del vídeo para mejorar su visibilidad.
- Promoción: Utiliza diferentes canales de comunicación para promocionar el vídeo (email marketing, redes sociales, etc.).
- Medir y analizar
- Feedback y métricas: Después de publicar el vídeo, recopila feedback y analiza métricas como vistas, tiempo de reproducción y tasas de conversión para evaluar su efectividad y hacer ajustes futuros.
Siguiendo estos consejos, podrás crear vídeos corporativos que no solo capturen la atención de tu audiencia, sino que también cumplan con tus objetivos de comunicación y promoción.
Compartir vídeos con Slack
Compartir vídeos a través de Slack puede mejorar significativamente la comunicación interna y externa en una empresa, facilitando la colaboración y aumentando la eficiencia en diversos procesos. Veamos a continuación algunos ejemplos.
Si nos centramos en la comunicación interna, compartir vídeos a través de Slack puede ayudar, entre otras cosas, con la formación de empleados o a que la colaboración en proyectos sea más fluida. Por un lado, compartir vídeos de formación en Slack permite a los empleados acceder a material educativo en cualquier momento y desde cualquier lugar. Esto es especialmente útil para la formación continua, ya que los empleados pueden revisar el contenido a su propio ritmo, asegurando una mejor comprensión y retención de la información. Además, la facilidad de acceso a estos recursos puede acelerar el proceso de onboarding de nuevos empleados, ayudándolos a integrarse más rápidamente en la empresa.
Por otro lado, la colaboración en proyectos se facilita enormemente cuando se utilizan vídeos. Por ejemplo, los miembros del equipo pueden compartir demostraciones de productos, prototipos o procedimientos a través de Slack, lo que permite una mejor comprensión visual y técnica. Además, los empleados pueden proporcionar retroalimentación visual sobre ideas y proyectos, lo que puede ser más efectivo y constructivo que la comunicación escrita.
Este mismo caso se puede aplicar a la comunicación externa. Por ejemplo, en el ámbito del soporte al cliente, los vídeos tutoriales y guías pueden ser extremadamente efectivos. Al compartir estos recursos en Slack, las empresas pueden ayudar a los clientes a resolver problemas de manera más rápida y eficiente. Además, los vídeos personalizados pueden utilizarse para responder a preguntas específicas de los clientes, proporcionando una atención más personalizada y mejorando la satisfacción del cliente.
Por último, pero no por ello menos importante, los vídeos corporativos son una excelente herramienta de marketing y promoción también a través de Slack. Compartir vídeos promocionales y de lanzamiento de productos en canales externos o grupos específicos en Slack puede generar interés y entusiasmo entre los clientes y socios. Los vídeos suelen ser más atractivos y compartibles que otros tipos de contenido, ayudando a la empresa a llegar a una audiencia más amplia y a generar un mayor impacto.