¿Hasta qué punto dirías que es importante la jerarquía en las organizaciones? Actualmente se debate sobre si es mejor un liderazgo más flexible y abierto o las estructuras de mando condicionales. Lo importante es que cada negocio acoja la opción que mejor encaje manteniendo un registro a través del organigrama empresarial.
Es un documento cada vez más imprescindible en un panorama organizacional que se complica con las áreas, líderes y departamentos que conforman un negocio. Estos cambios han propiciado que el organigrama empresarial sea imprescindible en la comunicación interna.
¿En qué consiste un organigrama empresarial?
El organigrama empresarial identifica la jerarquía de una empresa, sus distintos departamentos, las posiciones de dirección y sus rangos de control, además del resto de miembros de la plantilla, sus responsabilidades y funciones. Aunque suele utilizarse sobre todo en grandes corporaciones, su desarrollo también resulta útil en pymes.
Miembros habituales en un organigrama de empresa
Aunque cada organigrama puede contar con niveles específicos en la organización de cada negocio, hay cuatro componentes que deben aparecer siempre en este tipo de representaciones:
- Los altos directivos, que lideran el organigrama.
- La gerencia intermedia, con miembros que tienen capacidad de decisión y personal a su cargo.
- Los empleados que trabajan en la empresa y dependen de ésta.
- Los servicios externos subcontratados por la organización, que no forman parte de ella.
Elementos clave del organigrama empresarial
Por otra parte, esta jerarquización debe mostrar una serie de datos que sirvan para identificar a cada uno de los miembros comprendidos en el organigrama de la empresa, entender cuál es su papel en la misma o contactar con ellos. De este modo, entre la información que debe conformar esta representación no pueden faltar los siguientes elementos:
- Identificación de cada miembro con nombre, apellidos y fotografía.
- Posición en la empresa.
- Responsabilidades.
- Departamento al que pertenece.
- Relación jerárquica con el resto de miembros.
Principales tipos de organigrama de empresa
Es posible configurar este documento a partir de diferentes modelos. Y es que la disposición de cada individuo y departamento en la representación tiene mucho que ver con la filosofía y las estrategias de una empresa, por eso podemos clasificar hasta 11 posibles tipos de organigrama empresarial:
Organigrama empresarial horizontal
Aquí la jerarquización se presenta de forma lineal de izquierda a derecha, situando los líderes de la organización en el lateral izquierdo del documento. Suele emplearse en organizaciones que pretenden trabajar mediante una jerarquía horizontal, dirigiendo la empresa de forma comunicativa y participativa.
Organigrama empresarial vertical
Un organigrama empresarial vertical, también llamado lineal, muestra una percepción contraria de la jerarquía y las responsabilidades en la organización, donde el mando está bien diferenciado y va de arriba a abajo entre líderes y departamentos. Se utiliza muy a menudo, ya que se desarrolla de forma sencilla y muestra perfectamente la distribución tradicional de las compañías.
Organigrama empresarial mixto
El organigrama empresarial mixto es una mezcla de los anteriores y es utilizado en grandes corporaciones para estructurar mejor los distintos departamentos de la empresa. Se representa situando los directivos jerarquizados de arriba hacia abajo y las diversas áreas de derecha a izquierda.
Organigrama empresarial de división
El organigrama empresarial de división o divisional es una especie de agrupación de distintos organigramas; un documento que incluye diversas representaciones de la estructura de cada una de las áreas de una misma empresa. Nos encontramos ante un modelo aplicable únicamente en negocios en los que cada área funciona de manera independiente.
Organigrama empresarial plano
En el punto opuesto, el de las pequeñas empresas, nos encontramos con el organigrama plano, diseñado para representar situaciones en las que no existe una cadena de mando como tal , sino una serie de miembros que desarrollan autónomamente sus responsabilidades, de forma lineal y sin jerarquización decreciente.
Organigrama empresarial jerárquico
El organigrama empresarial jerárquico podría incluirse dentro de la tipología lineal o vertical: la diferencia entre es que en aquí se le da más importancia a los departamentos, las posiciones y responsabilidades que a los miembros que las ocupan -muy útil para organizaciones con una rotación elevada en puestos de mando-.
Organigrama empresarial matricial
El organigrama de empresa matricial une departamentos y roles mediante líneas horizontales y verticales, relacionando las posiciones de mando con cada una de las funciones que se desarrollan en él y los miembros que lo ocupan. De este modo, casi todos los puntos quedan unidos entre sí de forma vertical u horizontal.
Organigrama empresarial circular
En el organigrama circular nos encontramos un planteamiento más visual. Se recomienda para organizaciones en las que haya una fuerte interdependencia entre las distintas áreas y se desarrolla situando los puestos de mando en el centro y rodeándolos por departamentos , disminuyendo la jerarquización desde dentro hacia fuera.
Organigrama empresarial de socios
El organigrama empresarial de socios está diseñado para corporaciones en las que únicamente trabajen los socios de la misma. Es similar al modelo de organigrama plano: aquí no hay jerarquías, ya que todos son líderes y cuentan con responsabilidades específicas.
Organigrama empresarial en pequeñas empresas
El organigrama para microempresas representa a la perfección el funcionamiento y la jerarquización de la misma. Se trata de equipos con muy pocos empleados en los que las responsabilidades resultan muy evidentes a nivel interno y externo.
Organigrama empresarial estructural
También llamado funcional, el organigrama estructural es aquel que se representa nuevamente de forma vertical, mostrando los distintos departamentos de manera separada, uniforme y muy estructurada jerárquicamente. Está prácticamente obsoleto, ya que aísla notablemente unas áreas de otras sin ser independientes en la práctica.
¿Cómo hacer un organigrama empresarial?
Independientemente de la tipología escogida, la realización de un organigrama empresarial es un proceso que se compone de una serie de pasos imprescindibles y que se debe abordar desde el área de recursos humanos. Su resultado depende de la recopilación de datos y de su organización en base a los intereses del negocio, algo que se logra a través de los siguientes momentos:
Escoge el tipo de organigrama adecuado según su propósito
Existen múltiples posibilidades a la hora de escoger el organigrama empresarial más adecuado en cada caso y es conveniente elegir el modelo que mejor concuerde con la situación, las necesidades y la estructura de cada organización, para desarrollarlo a partir de esta base.
Identifica los diferentes departamentos
Cualquier corporación está compuesta por diversas áreas que deben quedar plasmadas con claridad en el organigrama. Es necesario identificarlas, diferenciarlas y entender su organización propia antes de representarlas en el documento, ya que en muchos modelos conforman la estructura sobre la que se asientan el resto de los datos.
Define las jerarquías
Si algo está claro es que en un organigrama de empresa es que la jerarquía es determinante en su configuración, independientemente de si está más marcada o resulta más plana, abierta y dispersa. Es otra de las cuestiones a determinar previamente antes de diseñar el documento.
Asigna responsabilidades y funciones
Además de la jerarquización de la compañía y de sus distintas áreas, el otro elemento fundamental en el organigrama empresarial son las funciones y responsabilidades de cada miembro. Es aconsejable tener cierto conocimiento de todos los roles antes de crear el documento.
Detalla un primer boceto global
Lo más habitual es desarrollar un primer boceto que nos ayude a visualizar cómo debe quedar el organigrama final. Esto nos sirve para redefinir la estructura que pretendíamos darle originalmente, ya que, además de los propósitos concretos de la representación, su estética también es relevante.
Diseña el organigrama de empresa
Cuando todo está definido por completo, no queda más que trasladarlo al documento final, en el que deben quedar contemplados los elementos mencionados anteriormente y todos los miembros de la organización que formen parte de su jerarquía a nivel general y departamental.
¿Para qué sirve un organigrama empresarial?
El organigrama de empresa tiene una marcada función informativa para los propios miembros y para los stakeholders externos. Dentro de este propósito podemos encontrar distintas utilidades que determinan la importancia de este documento para el negocio :
- Mejora la comunicación interna con mayor claridad al escoger los interlocutores.
- Determina quién debe encargarse de tomar cada decisión.
- Permite identificar con claridad oportunidades de mejora.
- Clasifica las diferentes áreas del negocio y quiénes las componen.
- Facilita el onboarding de los nuevos empleados, que obtienen una visión más clara de la disposición de la empresa.
- Ayuda en la planificación del crecimiento de la empresa a partir de la identificación de necesidades y responsabilidades.
- Asigna los recursos a cada área con más claridad.
- Muestra la cadena de mando y la jerarquía de la empresa.
Por qué es importante desarrollar el organigrama de empresa
Nos encontramos en un mercado cada vez más competitivo en el que los detalles son determinantes, y todas las funciones que cumple un organigrama empresarial son suficientes como para tenerlo en cuenta en la comunicación de la empresa.
Slack se ajusta a las necesidades comunicativas que plantea el organigrama empresarial, puesto que permite crear distintas conversaciones y clasificarlas por áreas y departamentos, además de incluir la unidireccionalidad de los mensajes como una posibilidad más en estos espacios.